Lo que se hace con y por amor perdura, como ha demostrado el solidario amigo venezolano Alirio Almao, abogado, historiador, periodista y prolífero escritor que, desde mucho antes de 1986, cuando visitó a Cuba por primera vez, se enamoró de esta tierra caribeña, la defiende, reseña en sus publicaciones y considera Patrimonio de la humanidad.
Reconoce el valor y la dignidad con que los cubanos han enfrentado el bloqueo económico, financiero y comercial, que el gobierno de Estados Unidos de América sostiene y recrudece desde hace más de 60 años, sin doblegarse ni cejar en el empeño de continuar esta obra grande, que es faro y guía para los demás pueblos del tercer mundo.
Como el consagrado investigador que es, Alirio concede mucha importancia al acercamiento entre ambos pueblos y sus líderes, remarcando el primer y único viaje que hiciera el prócer de la independencia de Cuba, José Martí, a Venezuela, a donde llegó, por Puerto Cabello, Estado de Carabobo, el 19 de enero de 1881 y al amanecer del día 21 arribó al Puerto de la Guaira. Lo que sucedió después, él mismo lo relata en su publicación ¨Tres héroes¨ (1889).
“Cuentan que un viajero llegó un día a Caracas al anochecer, y sin sacudirse el polvo del camino, no preguntó dónde se comía ni se dormía, sino cómo se iba a donde estaba la estatua de Bolívar. Y cuentan que el viajero, solo con los árboles altos y olorosos de la plaza, lloraba frente a la estatua, que parecía que se movía, como un padre cuando se le acerca un hijo (…) ¨.
Alirio Almao investigó y escribió sobre esa visita de Martí al país sudamericano, donde permaneció durante seis meses, manifestándole amor, admiración y apoyo, resumido en esta frase: ¨Deme Venezuela en qué servirla: ella tiene en mi un hijo”. De la misma manera patentizaba su vocación y proyección americana al escribir: ¨De América soy hijo: a ella me debo¨.
Sobre las históricas relaciones de Venezuela y Cuba, también el investigador relató la participación de solidarios de su país en las guerras independentistas de la mayor de las Antillas y otros acontecimientos que hermanan a ambos pueblos, como el primer viaje del Comandante en Jefe Fidel Castro a la tierra de Bolívar y Chávez, del 23 al 27 de enero de 1959, es decir, apenas unos días después del triunfo revolucionario y su entrada a La Habana al frente de la Caravana de la Libertad.
Como parte de su amplia obra literaria, Alirio distingue al reconocido diplomático, pedagogo e historiador cubano, Francisco Pividal Padrón, primer embajador de la Revolución cubana en Venezuela y quien, en su condición de biógrafo del Libertador Simón Bolívar, desempolvó su pensamiento de la manera en que era minimizado por las oligarquías, que sólo mostraban al Libertador, desde las frías estatuas de mármol o bronce.
Las firmes posiciones en apoyo a Cuba, a través de sus escritos y comparecencias radiales y televisivas incluyen, entre otros acontecimientos, su libro, ¨Ni los huracanes podrán derribar al socialismo cubano¨, coincidiendo con el aniversario 50 del triunfo de la Revolución; narraciones sobre la movilización popular por la liberación del pequeño Elián González, secuestrado por su familia en EE.UU., concluyendo con la entrega del niño a su padre.
De ese amor, admiración y respeto por Cuba, su Revolución, el valor, las tradiciones y dignidad de este pueblo, se derivan sus frecuentes visitas a varias provincias del país, incluyendo a Holguín, a donde vino por primera vez en el año 2010, en condición de delegado al VI Coloquio Internacional por la Liberación de los Cinco Héroes y contra el terrorismo y desde entonces ha tenido la oportunidad de participar en diversas actividades socio-políticas y culturales.
Recientemente, en otra de sus visitas a esta nororiental provincia cubana, el amigo Alirio Almao sostuvo emotivos y fructíferos intercambios con los presidentes de, el capítulo Holguín de la Sociedad Económica Amigos del País; la Sociedad Cubana de Ciencias de la Información (Socict); Filial Provincial de la Sociedad Cultural José Martí y de la Cátedra honorífica ´Oscar Lucero Moya´ de la Universidad de Holguín.
También participaron representantes de, la Asociación Cubana de Pedagogos de Cuba y de la Unión Nacional de Historiadores de Cuba; la especialista de Relaciones Internacionales de la Casa de Iberoamérica, así como directivos, profesores y alumnos de varios centros educacionales.
De la misma manera, el destacado defensor de la causa cubana en la hermana República Bolivariana de Venezuela, recibió amplia información sobre las votaciones que tendrán lugar el venidero día 26, para elegir a los diputados a la Asamblea Nacional. En el caso de esta provincia, los electores de los 14 municipios que la integran votarán por 40 posibles diputados, quienes, por estos días, sostienen encuentros con ellos en sus correspondientes demarcaciones, en los que participan trabajadores, campesinos, estudiantes del nivel medio y universitario, cederistas y federadas.
Alirio reconoce que las elecciones en Cuba son muy diferentes a las de países que se autodenominan democráticos, porque el Partido no postula ni elige, si no, los ciudadanos, y las urnas son custodiadas por pioneros.
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