Envejecimiento en Cuba

Envejecimiento poblacional, desafío demográfico en Cuba

El envejecimiento poblacional y la reducción de la natalidad constituyen rasgos distintivos de la dinámica demográfica en Cuba, cuyas políticas públicas están llamadas a encarar visibles desafíos por las interrelaciones entre población y desarrollo socioeconómico y cultural.

En 2023 hubo apenas 90 mil 300 nacimientos, la cifra más baja de las últimas seis décadas, indicó el Gobierno en febrero de 2024, al remarcar la necesidad de “una mirada profunda e integral a cuestiones asociadas a la disminución de la tasa global de fecundidad y la atención al adulto mayor”, el único grupo con crecimientos continuos, reveló el periódico Granma.

A juicio de las autoridades, el comportamiento inercial de los indicadores demográficos plantea numerosos retos para los gobiernos territoriales, organizaciones, instituciones académicas y actores sociales en general.

Lea también: 

Fortalecen en Holguín atención al adulto mayor

“Ante este escenario, la comprensión, la atención y el control de la situación demográfica requiere de un cambio de mentalidad”, señaló el primer ministro, Manuel Marrero, en la más reciente reunión de la Comisión Gubernamental encargada de atender el tema.

Al abordar la problemática en 2024, Marrero convocó a buscar soluciones a partir de los recursos locales, y a dar seguimiento a los indicadores que reflejan los avances y las deficiencias.

Al respecto la viceministra primera de Economía y Planificación, Mildrey Granadillo, destacó que el plan para el año en curso contempla acciones vinculadas al funcionamiento de las casas de abuelos y los hogares de ancianos, así como el incremento de las capacidades en los círculos infantiles.

De acuerdo con el Centro de Estudios Demográficos de la Universidad de La Habana el aumento del número de ancianos y su propio envejecimiento coinciden con las tendencias de la familia en Cuba, entre ellas, la reducción del tamaño, la creciente participación de la mujer en la actividad laboral y el auge de la jefatura femenina de los hogares.

La subdirectora de la institución, Matilde Molina, explicó que la fecundidad en las adolescentes aumentó en casi todos los territorios objetos de la muestra, mientras el análisis sobre el envejecimiento arrojó un predominio de las personas en las edades más frágiles, de 85 años en adelante.

Por su parte la viceministra primera de Salud Pública, la doctora Tania Margarita Cruz, puntualizó que se trabaja en la ubicación de hogares maternos en municipios carentes del servicio, así como en la atención diferenciada a las gestantes y en la prevención del embarazo en la adolescencia.

Con información de Prensa Latina

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

ocho + doce =